La primera característica de la Comunicación No verbal es que no se nos enseña porque no forma parte del sistema “educativo”. Sin embargo la aprendemos.
La segunda y esencial característica es que, debido a lo anterior, es la habilidad más desconocida y, como consecuencia, no tenida en cuenta en una de las claves de la satisfacción personal como es la interacción interpersonal.
“Si no te gusta lo que recibes, presta atención a lo que emites”.
LAIR RIBEIRO
El presente artículo pretende aportar una iniciación a este conjunto de habilidades que, sin duda alguna, nos interesan para saber aspectos como:
- Por qué no llega mi mensaje cuando yo creo que lo he expresado “bien”.
- Por qué hay personas que me caen mal y no tengo una explicación lógica para ello
- Por qué se enfadan conmigo si yo no estoy enfadado ni he querido molestar.
- Qué es más útil en mitad de una discusión o pelea verbal
- Qué habilidades no verbales son decisivas en la comunicación humana.
Índice del artículo:
- 1.- El aprendizaje inicial de la Comunicación No Verbal
- 2.- Las ventajas de la autoobservación y la observación sistemática
- 3.- La coherencia entre la Comunicación Verbal y la No verbal
- 4.- Las habilidades decisivas.
- 5.- Los mensajes colaboradores.
1.- EL APRENDIZAJE INICIAL DE LA COMUNICACIÓN NO VERBAL
El ser humano nace sintiendo unas manos que lo recogen y acogen y comienza a escuchar unos sonidos (palabras) indescifrables.
No ve nada, no entiende qué pasa y decide estimular algunos músculos que hasta entonces no había tenido ocasión: llora, gime, grita,…
Esta impronta es decisiva y marca el inicio de un aprendizaje asistemático que le ayudará a mantener una zona de confort o salir de otra de disconfort.
A partir de entonces comienza a valorar que, esos sonidos que producen fundamentalmente la voz de sus padres y cuidadores, son una suerte de enlaces con su comodidad y satisfacción, inicialmente fisiológica y más tarde psicológica y social.
Los primeros años son decisivos. Antes de los 12 meses de edad se aprenden los tonos de voz y la calidez del contacto físico. Entre el primer y el tercer año, se conoce el valor extraordinario de la mirada y, a partir de entonces y hasta los seis años, se comienza a unir las palabras con los mensajes unidos a ellas: volumen y ritmo.
Una vez se ingresa en la escuela se afina la importancia de la “distancia” y de la “posición del cuerpo” y de los gestos con las manos.
Todo este conjunto de mensajes se van “pegando” al aprendizaje de las palabras y del lenguaje articulado e, indefectiblemente, van conformando nuestra expresión y presentación ante los demás, los próximos y los lejanos.
Queda pues claro que el aprendizaje de la comunicación No Verbal es anterior a la Verbal, que su importancia es decisiva en la transmisión de emociones y sentimientos y que, ante la duda, siempre vamos a “recurrir” a nuestros primeros pasos conocidos.
Esto perdurará así toda la vida y, muy probablemente seguiremos inconscientes de ello, porque su adquisición ha sido asistemática, emocional y desde multitud de modelos, tantos como personas con las que interactuamos.
DESVENTAJAS DE PERMANECER EN LA INCONSCIENCIA:
- Nos provoca una vaga incomodidad con nosotros mismos. Ante las mismas situaciones, en ocasiones sabemos transitarlas y en otras perdemos el control.
- Desconocer la importancia de los mensajes no verbales impide su mejora o cambio.
- La potencia de una mirada o un tono de voz son más decisivas que el contenido de lo expresado, lo que suele modificar el efecto comunicativo, lo que puede provocar confusión tanto en nosotros como en nuestro interlocutor
VENTAJAS DE MEJORAR EL CONOCIMIENTO SOBRE LO NO VERBAL:
Mejorar el conocimiento de nuestra emisión de mensajes No Verbales nos ayuda significativamente:
- Para acompasar nuestras palabras (contenido mental) con nuestras emociones (intención): coherencia comunicativa
- Nos evita herir o molestar a nuestro receptor porque cuidamos su momento y contexto.
- Enfatiza nuestro mensaje dándole credibilidad.
- Puede llegar incluso a sustituir a las palabras o mensajes verbales y con ello agilizar la comunicación
En resumen, antes de los siete años ya tenemos más del 80 por ciento de nuestros hábitos de comunicación No Verbal, por lo que se requiere disciplina y tiempo de aprendizaje para conocerlos, refinarlos y mejorarlos.
Si la comunicación humana es una de nuestras características más diferenciales, parece obligado prestarle atención y, con ello, mejorar nuestras relaciones interpersonales.
Como primer acercamiento, proponemos la visión de la siguiente entrevista al psicólogo David Matsumoto, director del Laboratorio de Investigación en Cultura y Emociones, que estudia el papel de la cultura, la emoción, la interacción social y la comunicación del ser humano, donde se enfatiza la importancia inicial de la comunicación No Verbal.
LA IMPORTANCIA DE LA COMUNICACIÓN NO VERBAL
POR DAVID MATSUMOTO
2.- LAS VENTAJAS DE LA AUTOOBSERVACIÓN Y LA OBSERVACIÓN SISTEMÁTICA
Aprendemos observando a los demás, inicialmente a nuestros progenitores y familia cercana. Y aprendemos todo y de todo, lo bueno y lo malo, lo útil y lo menos útil.
Los bebes observan muy pronto pero tardan mucho tiempo hasta que aparece la observación propia, la autoobservación. El espejo, las fotografías, los videos y las reacciones de los demás nos empiezan a dar pistas, pero no es suficiente.
Y ya sabemos que no hay una información o formación específica en el sistema educativo que nos enseñe la importancia de la sonrisa y de las expresiones faciales, la variedad y significado de los gestos con las manos o el valor e intensidad de una mirada.
Los estudios más recientes demuestran que las emociones son mejor expresadas por los comportamientos no verbales que por las palabras, ya que éstas se van contaminando de los hábitos culturales y sociales. Esta premisa nos lleva a afirmar que es muy relevante que “sepamos” qué es lo que emitimos y esto nos lleva directamente a la autoobservación, proceso extremadamente complejo por tres razones:
LA COMPLEJIDAD DE LA AUTOOBSERVACIÓN:
- Hay una dificultad intrínseca en “vernos” y “oírnos” en directo, cuando está ocurriendo la interacción comunicativa.
- Los padres no enseñan sino que “muestran” sus propias expresiones y movimientos. No hay intencionalidad pero sí que hay efectividad en nuestra copia e imitación. Es el aprendizaje vicario.
- La educación formal se centra en contenidos verbales, que van directamente dirigidos al hemisferio izquierdo, y los hábitos comunicativos no verbales son eminentemente emocionales y estos se ubican en el hemisferio derecho
Observarnos es el proceso perceptivo más valioso y, a la vez, más difícil de objetivar, porque somos a la vez el observador y lo observado.
Es muy valioso porque nos aporta esa información necesaria para evitar la improvisación y la aleatoriedad, lo que nos permitirá avanzar en el proceso comunicativo con cierto control y consciencia, transmitiendo armonía y calidad en nuestro mensaje tanto Verbal como no Verbal.
En el siguiente video que proponemos profundiza en la importancia de la autoobservación tanto interna como externa.
La Comunicación comienza “dentro” (pensamientos y emociones) y acaba “fuera” (palabras y conductas). Hay un mundo interior que “eventualmente” sale al mundo exterior.
Pero para que este trabajo tenga sentido tiene que ser ejercido sistemáticamente, es decir, en toda ocasión o evento, sobre todo aquellos donde hay mayor responsabilidad y consecuencia de los resultados.
Observarse con los que nos quieren es muy necesario y tiene una gran capacidad de aprendizaje porque estamos “cubiertos” de tolerancia.
Pero no es así en eventos comunicativos con personas con las que no tenemos esa cercanía y confianza. En ambos casos, debemos plantearnos un programa de aprendizaje, donde registremos nuestros avances y fallos, evaluando de forma sistemática nuestra ejecución.
Las técnicas más comunes son dos: preguntar y grabarse.
Es la manera más fácil de oír y ver qué hacemos y cómo decimos lo que decimos. Gurdjieff lo llamaba “el recuerdo de si”.
3.- LA COHERENCIA ENTRE LA COMUNICACIÓN VERBAL Y LA NO VERBAL
Un aspecto decisivo de la comunicación humana es la coherencia del mensaje. No es posible ser creíble en nuestras palabras si nuestro mensaje corporal (cara, ojos, boca, frente, manos, distancia y posición del cuerpo, tono y volumen de voz) no está transmitiendo y acompasando al significado de nuestra emisión verbal.
7%: Verbal.
PORCENTAJE DEL CONTENIDO VERBAL Y NO VERBAL
38% Tono de voz.
55% el resto de mensajes no verbales.
Sabemos desde hace mucho tiempo que el contenido verbal de un mensaje (significado mental) no va más allá del 7 %, que el tono de voz llega hasta un 38 % y que el 55% restante son el resto de mensajes no verbales que ya hemos apuntado.
Creer que nuestro interlocutor va a dar más importancia a nuestras palabras que a su “tono”, es desconocer uno de los principios básicos de la comunicación que no es otro que es un comportamiento emocional más que racional, aunque en la educación escolar se insista más en lo contrario.
El visionado del siguiente video nos da unas cuantas pistas a determinados comportamientos no verbales y su posible interpretación por parte de los demás.
La coherencia o credibilidad entre lo que digo y cómo lo digo está directamente relacionada entre si lo que pienso también lo siento. Sentir no es pensar y las emociones “salen” de nosotros en el mensaje No Verbal.
Teresa Baró nos acerca muy sencillamente a estas conductas tan decisivas en nuestra vida personal y profesional.
4.- LAS HABILIDADES DECISIVAS
Veamos ahora qué es decisivo en la Comunicación No verbal teniendo en cuenta siempre que los aspectos culturales, sociales y de contexto explican mucha parte de lo adecuado y admitido, sin olvidar jamás que las palabras también cuentan y no podemos dejarlas de lado, ni mucho menos.
Ya hemos anticipado en los párrafos anteriores algunas de las conductas No verbales más relevantes, pero son tantas y es tal el entramado que ellas mismas conforman, que debemos anticipar que delimitarlas de “una en una” no es tal como ocurren en la realidad, donde todo sucede a la vez.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, señalamos las más significativas:
4.1.- CONTACTO OCULAR: LA MIRADA
Es el comportamiento No Verbal más decisivo. Dónde dirigimos la mirada es el factor que señala a nuestro interlocutor la atención, la intención y la emoción que proponemos, por lo que hay que dirigirla a los ojos y al rostro de nuestro oyente, cuando estamos en el rol de emisor.
Y mucho más cuando nuestro rol es de receptores y estamos escuchando. Ver más matices en el siguiente video donde se mencionan…
Los movimientos de las cejas y párpados, la dilatación de las pupilas, miradas oblicuas, etc.
La proporción de tiempo también es relevante tenerla en cuenta y la más adecuada es 80/20. Ese veinte por ciento que no va a los ojos aligera nuestra interacción (evita la sensación de agresión) y nos permite “liberar” a nuestro oyente durante unos segundos y también nos ayuda a nosotros para observar otros comportamientos no verbales: gestos con las manos, gestos en los labios, cambios de posición corporal, etc.
4.2.- GESTOS CON LAS MANOS:
Cada cultura tiene sus movimientos y gestos y les da un significado que puede ser distinto al de otros paradigmas culturales, pero sabemos que las manos y los dedos son un vehículo de transmisión de gran relevancia cuando acompañan adecuadamente a las palabras.
Un gesto claro y sostenido a tiempo puede ser decisivo para ser entendidos y una ausencia de movimiento de las manos puede ser valorada como inapropiada y cambiar el curso de la interacción.
El mayor ejemplo lo tenemos en el acto de “dar la mano” en el momento de saludar o despedirse.
No darla tiene un significado profundo de distancia emocional y darla inadecuadamente manifiesta indicios de ansiedad e incomodidad. Sin embargo, darla con firmeza y sostenida durante 5-7 segundos transmite calidad y calidez en el encuentro, en definitiva, confianza.
En este video de Hemisferio derecho, se profundiza con mucha precisión los movimientos de este comportamiento no verbal tan importante.
En el siguiente video de Miguel Figueroa Ingunza, se profundiza más en el…
Impacto de la comunicación no verbal en las presentaciones en público, momento este donde la habilidad gestual de las manos y el cuerpo es decisiva.
4.3.- EL TONO DE VOZ
Lo primero que un bebé aprende es el “tono” de voz de sus progenitores. No entiende las palabras pero si capta la emoción que conllevan.
Todos hemos escuchado palabras difíciles de aceptar pero si están expresadas con un tono determinado somos capaces de entenderlas y comprender el sentido que nuestro hablante nos quiere transmitir.
La ironía, el sarcasmo, el humor, la cadencia y muchos otros matices hacen que una palabra esté significando aspectos más sutiles que el propio contenido semántico de las palabras.
De igual manera, un tono cercano al grito u otro que apenas es un susurro transmiten más información emocional que toda la comunicación verbal que nuestras palabras quieran expresar.
Y tan importante es estar pendiente de los tonos que recibimos como de los que emitimos.
Un tono cálido y acogedor puede llevarnos a una buena resolución de una conversación sobre algún tema espinoso. Por el contrario, un tono áspero donde se utilizan muchos sarcasmos y sobreentendidos hace que la interacción sea incómoda y poco empática.
En este breve video, se señalan de forma amena los diferentes tonos de la voz y el uso del “tono medio”.
CONCLUSIONES:
Como resumen y enmarcando todo lo anteriormente señalado, proponemos visionar este video de una entrevista a Daniel Goleman, en la que se enfatiza la importancia de la Inteligencia emocional y como uno sus vehículos más importantes es el comportamiento no verbal.
Autor: Kike
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